Reflexiones de cercanias: Dia 1

Ni siquiera sé por qué se me ha ocurrido meterme en el caos.
Caos en el que, paradójicamente, reina un silencio que me hiela hasta los huesos, un silencio incómodo y, por extraño que parezca, apacible.

Apacible porque sé que estás ahí, ausente y sin mirarme.

Me frustro, cierro los ojos, imagino que todo desaparece, pero sigues estando tú, a mi lado.

Vuelvo a cerrarlos, cuento hasta diez esperando que todo vuelva a ser como antes, antes de conocerte, pero todo gira en torno a un vórtice que me conduce de nuevo a ti, y que me impide volver a empezar.

Debo estar mal de la cabeza, debo de tener un imán que me atrae hacia ti y que irremediablemente terminará matándome.















Lástima, siento lástima y no por ti, sino por mí. Lástima, porque nunca tengo en cuenta las consecuencias de mis decisiones.




Retrospectiva:

Aún sigo notándolas. Me duelen, me queman.

Aún siguen ahí, recordando aquel día en el que mi pecho se resquebrajó en mil pedazos.

Recordando aquellos días en los que me rodeaba el torso pensando que en cualquier momento podría abrirse la herida.


Si, aún me acuerdo. Me acuerdo de aquellas noches en vela, llorando un mar de lágrimas y esperando un abrazo inexistente.

Y es que, mis cicatrices, muy lejos de cerrarse, siguen abriéndose cada día más.












Pero es que, desgraciadamente, sigo creyendo.

Incomprensión....

¿Pará que te haces un blog? Si no tienes nada que contar….

Igual tienes razón, pero no sé, tal vez solo necesite desahogarme y contar lo que se me pasa por la cabeza.




¿Nunca te has parado a pensar si realmente estás cumpliendo tus sueños?

Yo en los últimos meses, me lo cuestiono cada día, no entiendo por qué he desaprovechado mi vida, no he pensado nunca en mí ni en mis intereses, y los años han ido pasando, y yo no he invertido en mi futuro.

Se te da bien una cosa, se te da bien otra…..pero, en ninguna eres un genio. En esta vida, tienes que serlo para que no te coman.

Y en el fondo, ni siquiera tengo claro nada….

No sé, mi cabeza tiene demasiados rompecabezas últimamente, y mi corazón demasiados parches. Definitivamente, hoy no estoy bien.

Tal vez no debería dejarme llevar, pensar un poco más las cosas, pero me es imposible. Me encanta ser así, aunque luego acabe mal. Porque a veces una, de buena es tonta y la gente se aprovecha de ti, pero aun así me niego a cambiar.
Quiero seguir siendo la misma, darlo todo por la gente que se lo merece, y seguir llorando cuando alguien me haga daño, y seguir teniendo esos agujeros en el corazón, porque de los errores siempre se aprende, aunque sea algo.

en próximos dias, reflexiones en los cercanias.